Hexagrama Nº 16. El Entusiasmo. Mutación secuencial líneas y complementario.

HEXAGRAMA Nº 16. YU / EL ENTUSIASMO

Interiormente receptivo y templado, presta atención a la tendencia y oído al rumor en que bulle la íntima querencia... la música de fondo, la ola que los conforma, el ritmo con que danzan y la letra con que sueñan aquellos con quienes haz de relacionarte por aquello que pretendes, y cuando te hayas hecho con el corazón de su armonía, sube al propio caballo y di tú la justa y sentida palabra que deba ser seguida.

VÍA EN MUTACIÓN

16. El Entusiasmo

COMPLEMENTARIO

51. La Conmoción

Si te jactas e inflas el globo tan vana y pomposamente, acabará estallándote en la cara. Analiza tus móviles a ver si se corresponden con la voluntad del Cielo.

VÍA EN MUTACIÓN

16. El Entusiasmo

COMPLEMENTARIO

40. La Liberación

De suelo con sustento para sustentarte ya conoces lo suficiente como para saber a estas alturas dónde debes o no debes pisar ¿a qué, pues, esa duda ahora?; persevera EN BASE FIRME, ultima respecto de aquello que te ha causado la reciente inquietud y vuelve a la segura utilidad de lo cotidiano.

VÍA EN MUTACIÓN

16. El Entusiasmo

COMPLEMENTARIO

62. Estar en lo Concreto

Ni te embobes puerilmente en la contemplación de lo que está por encima de tu alcance, ni dudes en atrapar la oportunidad que justamente te corresponde. Agilidad, reflejo y sentido de la oportunidad... Pero todo ello ha de ser con los pies sobre la tierra y sin alejarse vanalmente de las necesidades más inmediatamente concretas.

VÍA EN MUTACIÓN

16. El Entusiasmo

COMPLEMENTARIO

2. Lo Receptivo

Fomenta, convoca, reúne, convence, entusiasma, asegura, y lleva con ellos, sin posterior extravío, a cabal cumplimiento lo propuesto. ¡Ventura!

VÍA EN MUTACIÓN

16. El Entusiasmo

COMPLEMENTARIO

45. La Reunión

Sobrevive subordinadamente en laboriosa y constante atención y reparación de los detalles a fin de que en virtud de tu sacrificio sea posible la conservación del todo.

VÍA EN MUTACIÓN

16. El Entusiasmo

COMPLEMENTARIO

35. El Progreso

Con sólo pararte a reflexionar desapasionadamente, habrás comenzado a trocar el ciego entusiasmo del encandilamiento por más progresivas luces sobre ti mismo y tu entorno circunstancial.

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