TING
EL CALDERO ORACULAR
DE YI CHING
(I)
HEXAGRAMA Nº 18. KU / EL
TRABAJO EN LO ECHADO A PERDER
Es tiempo
de retomar el trabajo que indolentemente hemos dejado descomponerse. Tápese la
nariz, espante las moscas, analice las causas de la descomposición, “tres días
antes”, replanifique y tutele la nueva directriz, “tres días después”, para
inmediata, decidida y enérgicamente meterle el hombro a fondo, consciente y
consecuentemente. “Es propicio atravesar las grandes aguas”: Así despabila el
noble la modorra de la gente y arrecia su espíritu. Ello labora en hora de un
elevado éxito.
LAS DIFERENTES LÍNEAS
LÍNEA Nº 1
Erraste,
mas el mal aún no fundó raíces. Peligro, pero al final ventura si… asumes la
responsabilidad del estado y rectificas.
“Arreglar
lo echado a perder por el padre.”
LÍNEA Nº 2
Reparar
las prerrogativas y confianzas, que por debilidad, un día concediste. Tiento es
el camino y punto medio su meta.
Sé
delicado en la corrección de errores de mamá.
LÍNEA Nº 3
Duro el
asunto y dura la energía desplegada en su reparación. Ello sin duda nos
producirá un cierto grado natural de arrepentimiento. Sin embargo no es una
falta muy grave, pues su descentralidad se halla compensada por la voluntad de
rectificación.
LÍNEA Nº 4
Va,
revisa… y no descubre a sus ojos nada que debiera y pudiera corregir. Demasiada
autocomplacencia exculpatoria:
“Tolerar
lo echado a perder por el padre. Al continuar así se verá la humillación.”
LÍNEA Nº 5
No,
creando, lo que ya no es posible; sí, mejorando –con ayuda- lo que hay. Esa es la aportación ahora.
Elogio a
su virtud.
“Arreglar
lo echado a perder por el padre.”
LÍNEA Nº 6
Caballero
cubierto ante reyes, príncipes y magnates: libre al servicio de más altos
ideales. Lo suyo es especialmente ejemplar.
“Bienes, y aun sandalias, no los he recibido de criatura alguna.” *
* Eclesiástico, 46.19